- Cinturón o tiras de seguridad: esto podrá proteger de cualquier caída a tu pequeñito, ya que lo mantendrá asegurado a la silla. Sin embargo, igual será necesario que cuando esté en su silla siempre se encuentre acompañado de un adulto responsable para vigilarlo.
- Estructura resistente: para saber si te brindará la firmeza y resistencia que necesitas para que tu pequeño esté bien sostenido y seguro, debes revisar el material del cual está hecha. Además, no olvides revisar que la parte superior sea de menor tamaño que la parte de la base, ya que hará que el peso esté bien distribuido y así evitar que tu bebé pierda estabilidad y se voltee.
- Esquinas de bordes redondeados y terminación suave: con esto conseguirás que sea más amigable para tu peque y evitar que se golpee o se corte con la misma silla.
- La altura apropiada para ti y tu bebé: primero debes revisar si tiene dispositivos para fijar adecuadamente la altura escogida, así se evitarán deslizamientos. Puedes optar por aquellas sillas que tiene opción de regular la altura según tu preferencia, esto te permitirá usarla por más tiempo, adaptándola al tamaño de tu bebé.
- El espacio para usarla: antes de encontrar el modelo de silla de comer ideal, debes tener muy en cuenta el espacio de tu hogar donde planeas usarla, sin que esta llegue a entorpecer la circulación regular de tu casa. Si tu espacio es muy reducido, puedes optar por las sillas plegables, las cuáles son perfectas para doblar y guardar luego de su uso, evitando que llene tu espacio el resto del tiempo.
- Ruedas y frenos: tener una silla que ruede será muy útil al momento de tener que moverla de un lugar a otro dentro de tu hogar. Pero, no olvides verificar que incluya un sistema de frenos, para que al momento que coloques tu bebé en ella puedas activarlo y así evitar que se deslice accidentalmente.
- Opción para salir: si amas dar paseos con tu bebé, necesitarás una silla portable que puedes llevar contigo a donde vayan. Estos modelos son bastante prácticos, solo debes fijarlo a una silla de auto y queda lista para usar.
- Modelo convertible: si lo que buscas es una opción que pueda darte más tiempo de uso, las sillas de comer convertibles te brindarán diferentes alternativas que podrás usar y cambiar a medida que tu pequeño crezca. Inicialmente te servirá para darle de comer, pero luego podrás transformarla en una mesa que también podrá usar tu bebé.
- Material lavable: no olvides que alimentar a tu bebé puede ensuciar bastante la base donde lo haces, por eso una silla fácil de limpiar te ayudará muchísimo a mantenerla en las mejores condiciones, logrando que el producto te dure más tiempo.
Un momento especial en el crecimiento de tu bebé es cuando está cerca de iniciar su alimentación complementaria. Es una etapa donde tu bebé comienza a conocer nuevos sabores y texturas en su boca, pero ¿has pensado en qué lugar puede disfrutarlo más? Pues es hora de buscar una silla de comer.
Antes de buscar el modelo ideal, debes recordar que el uso de la silla de comer, y cualquier otra silla, es exclusivo para cuando tu pequeño ya tenga firmeza para sostener su propio cuerpo y cabecita, de modo que sea hábil de sentarse por sí mismo. Lo usual es que esto se mantenga aproximadamente entre los 6 meses y los 3 o 4 años de edad.
Entonces, ¿qué debería tener una silla de comer para que sea la correcta para tu bebé? Te contamos algunos puntos esenciales que puedes considerar: